Sobra decir, que la mayor parte, por no decir toda la nueva hornada de comunistas y “progres”, en general, de nuestros días que nos gobiernan, son “niños” y “niñas” de la clase acomodada. Se me viene a la cabeza lo que pensarían Marcelino Camacho o Nicolás Redondo, por citar algunos, de estos “pijoprogres”, que en su vida han sabido lo que es compaginar el trabajo en una fábrica con la defensa real de los derechos de los trabajadores, o nunca han estado en prisión por cuestiones de políticas como ellos estuvieron en la época del dictador Francisco Franco, régimen del que parece estos niñatos parecen conocer todo y haber sufrido todo pero en el nunca viviendo porque nacieron bien entrada la democracia, hecho que muy bien ha resumido otro antiguo comunista y economista en el discurso de la moción de censura, Don Ramón Tamames, recordándoles algunas cosas como que “su larga carrera política, su lucha contra Franco, su paso por la prisión, su pasado comunista y su papel en la Transición. Tamames ha recordado en 1956 la rebelión estudiantil, en la que tuvo que pisar la cárcel, donde reflexionaron sobre la unidad nacional. Allí pasó un tiempo por “pedir una constitución democrática para España”. Y ha defendido la Constitución de 1978 y criticado la idealización de la Segunda República.”
Algunos de estos “comunistas” que proceden de clases acomodadas, como Baltasar Garzón (Ministro de Consumo actualmente, además de militante del Partido Comunista de España y de Izquierda Unida) o Rita Maestre “osea, osea” (entre 2015 y 2019 portavoz del gobierno municipal, delegada del Área de Portavocía, Coordinación de la Junta de Gobierno y Relaciones con el Pleno y miembro de la Junta de Gobierno de la Ciudad de Madrid. Desde junio de 2019 es portavoz de Más Madrid) muestran las típicas contradicciones entre lo que dicen desde su ideología globalista y progre (neocomunismo) y lo que hacen.
Me voy a centrar en nuestro amigo Alberto Garzón que como comunista y Ministro de Consumo dijo lo siguiente en un medio británico, en The Guardian:
people in Spain needed to realise the huge impact that eating meat – particularly beef raised on industrial megafarms – had on the environment, and to change their eating habits accordingly.
(La gente, en España, necesita darse cuenta del impacto tan importante que tiene comer carne – especialmente el aumento de las megagranjas- sobre el medioambiente, y es por ello que deberían cambiar sus hábitos de consumo de carne )
https://www.theguardian.com/world/2021/dec/26/spanish-should-eat-less-meat-to-limit-climate-crisis-says-minister
Bien, como buen “progre” recomienda una cosa y hace lo contrario. En su boda, celebrada en “una modesta finca” de Toledo, en su menú no podía faltar la carne:
- Bogavante,
- Solomillo,
- Foie
- y cava
O, por ejemplo en la Feria de Abril, aparece comiendo un saludable bocadillo de jamón.
De la misma forma, hace años, Podemos emprendió una campaña contra Coca-Cola, pues bien, uno de los sus miembros, fue pillado en el Congreso de los Diputados con un par de coca-colas.
Otro más conocido, es Pablo Iglesias que criticaba a la compañía Apple, pero llevaba un iPhone, que como todos sabemos no es precisamente barato.
Y así podríamos seguir con esta lista de niños bien metidos a salvamundos seguidores de este nuevo neocomunismo que es bueno para los demás, pero no para nosotros, para eso somos la élite que dice lo que tenéis que hacer vosotros para salvar el planeta, es decir, las privaciones para los demás pero no para nosotros, es decir, la tan nombrada Agenda 2030 ( https://www.youtube.com/watch?v=tlzTsNSJsmc )